IMG_0195

Frente al mar

El día que le dijeron a mi madre que tenía cáncer yo estaba en la playa, de vacaciones, y solo puedo recordar que estaba frente al mar, paralizada, sorda, muda, ciega. Son cosas que les pasa a otras familias, y sin embargo ahí estaba yo, de pie frente al mar y pensando: «a mi madre no, a ella no».

El día que mi madre supo que tenía un cáncer recordé todas sus palabras, las ya dichas y las que no, sus miedos, sus advertencias, sus consejos. También lo vivido con y sin ella, lo robado, lo disfrutado y lo no conseguido. Ese día mi madre fue la ola del mar, la arena, el viento. Fue el niño probando la temperatura del agua, la madre vigilante, la pareja enamorada que disfruta de sus primeras vacaciones juntos. Sentí su mano en el abrazo de mi hija, en las palabras de mi compañero, en la mirada de mis amigos, y en el vacío de mi hermano ausente. Y como si el tiempo no me perteneciera, ni el espacio, como si solo ella hubiese sido mi origen, mi existencia y mi futuro, me dejé llevar y mecer por las olas, pensando que quizás los médicos no lo saben todo, que mi madre no podía tener esa enfermedad, ella no.

Y recordé a mi madre, su olor, su piel, su mirada y su tono de voz, que vino a acompañarme y a decirme: lucharé, como siempre lo he hecho, y todavía podré estar contigo mucho tiempo.

Después de pelear con la enfermedad ganó. En ganas de vivir, en modos de soñar, en maneras de crear, su cuerpo se volvió liviano, y su cabeza cogió altura.

 

Related Posts

IMG_6467 La Ola… Fotografía de Mariano Sanz Prieto A veces…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>